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“El aborto lastima y daña la dignidad de la mujer”
Ante una multitud de fieles que se concentraron en la plaza central de la ciudad de Nueve de Julio, el obispo diocesano, monseñor Ariel Torrado Mosconi tras bendecir los ramos de olivo hizo un grave llamado a los católicos a defender la vida y la integridad femenina.
Convocó a los fieles a defender la vida y a pronunciarse en contra del aborto,Asimismo los exhortó a no dejarse embaucar con relatos falaces sobre la práctica del aborto. “Que no nos mientan diciendo que es un derecho de la mujer. El aborto lastima y daña la dignidad de la mujer”- enfatizó-. “Se han inventando relatos y argumentos mentirosos que nos quieren hacer creer que el aborto y el matar a los inocentes es en defender de la mujer y es defensa de los niños. Ustedes saben tan bien como yo, mis queridos cristianos, y nuestra fe cristiana así nos lo enseña, que el aborto es una agresión terrible a la mujer. Por eso nuestra cercanía, nuestro cariño, nuestra comprensión y la misericordia de Dios para todas aquellas mujeres, muchas de ellas quizás aquí presentes, que lo han sufrido”.
De este modo adhirió a la campaña que llevó adelante la Iglesia en toda la Argentina. Con el hastag #Toda Vida Vale, las diócesis del país adhirieron el viernes 25 de marzo, fecha que se celebra el Día del Niño por Nacer y que coincidió este año con el Domingo de Ramos. De este manera la diócesis de 9 de Julio se pronunció también en contra de la intención de llevar el debate de la legalización del aborto al congreso nacional..
Durante su homilía, el prelado reiteró en varias oportunidades que, como Iglesia, se debe defender especialmente a los más vulnerables. “Debemos cuidar, de una manera muy especial, a esos niños indefensos, cuyo vientre materno es el lugar más seguro y el cobijo más querido y el lugar por antonomasia de la defensa de la vida”.
Por último instó a los presentes a promover los valores de la preservación de la vida y de la dignidad humana. “Pidamos hoy, especialmente al Señor que todos al llevar nuestro ramo a nuestros hogares, sin ideologías ni de derechas ni de izquierdas, sino simplemente en defensa de la vida de los niños y de las madres y de todos los más vulnerables como los ancianos y los enfermos. Es de lo más profundo de nuestros corazones, los cristianos debemos gritar que Toda Vida Vale. Que el Señor nos ayude a todos a dar esta buena noticia, este Evangelio de la vida”, finalizó.
<Leer homilía completa>La vida siempre es un regalo, nunca una amenaza