Fiestas patronales de Santa Rosa de Lima en Bragado y 30 de agosto

Santa Rosa de Lima, laica peruana del siglo XVI, declarada patrona de América, es la patrona de una de las dos comunidades parroquiales de la ciudad de Bragado, de la parroquia de Treinta de Agosto en el partido de Trenque Lauquen y de la capilla de Magdala en el partido de Pehuajó.

El obispo diocesano se hizo presente en Treinta de Agosto el jueves 29 por la tarde en el último día de la Novena preparatoria a la festividad. Durante esas horas visitó algunos lugares de la localidad, mantuvo una reunión con el Consejo económico parroquial para luego presidir la solemne celebración eucarística de la víspera de la patrona en la cual confirmó a un grupo de adultos y de niños de la zona rural. Por la noche tuvo lugar una amena cena compartida con el párroco local padre Luckasz Walawski, colaboradores de la tarea pastoral y algunos de los confirmandos.

La celebración continuó al día siguiente, viernes, con la procesión, la misa concelebrada por los sacerdotes de la zona y el almuerzo comunitario con el cual la localidad celebra su día.

El viernes 30, monseñor Torrado Mosconi, presidió la multitudinaria procesión y misa central de la solemnidad de Santa Rosa de Lima en la ciudad de Bragado, concelebrada por el cura párroco, padre TomszWargocki, el párroco de San Martín de Porres, padre Gustavo Sosa y el padre Carlos Tibberi, párroco de Veinticinco de Mayo y canciller del obispado junto a varios seminaristas. A la celebración, que se llevó a cabo en el atrio de la iglesia matriz, asistieron autoridades municipales y delegaciones escolares y de instituciones ciudadanas.

En las dos ocasiones pudo tomar contacto, saludar y conversar con los fieles presentes.

En ambas celebraciones, comentando el evangelio de la celebración eucarística, el pasaje de la perla y el tesoro escondido del capítulo trece  en el evangelio de Lucas, el obispo diocesano subrayó la importancia y necesidad de redescubrir la fe como aquella auténtica riqueza que da sentido a la vida, sobre todo en momentos de dificultades o crisis. “Quedarse, centrarse y apoyarse en lo esencial, da fuerza y mucha esperanza en tiempo de dificultades” subrayó enfática y repetidas veces.